jueves, 29 de octubre de 2015

Valores "Lealtad"



Qué es Lealtad:

Lealtad es el carácter de una persona. El término de lealtad expresa un sentimiento de respeto y fidelidad hacia una persona, compromiso, comunidad, principios morales, entre otros. 
El término lealtad proviene del latín “legalis” que significa “respeto a la ley”.
El término leal es un adjetivo usado para identificar a un individuo fiel en base a sus acciones o comportamiento.   
Lo opuesto de lealtad es traición, es la falta que comete una persona debido a que no cumple su palabra o es desleal. 
El término de lealtad puede ser usado como sinónimo de: nobleza, rectitud, honradez, honestidad, entre otros.



Lealtad como valor

Lealtad como valor es una virtud que se desenvuelve en nuestra conciencia, en el compromiso de defender y de ser fieles a lo que creemos y en quien creemos. La lealtad es una virtud que consiste en la obediencia de las normas de fidelidad, honor, gratitud y respeto por alguna cosa o por alguien bien sea hacia una persona, animal, gobierno, comunidad, entre otros.
En referencia a este punto, algunos filósofos sostienen que un individuo puede ser leal a un conjunto de cosas, en cambio, otros sostienen que únicamente se es leal a otra persona ya que este término atañe exclusivamente a relaciones interpersonales.

Asimismo, en una amistad no es suficiente únicamente el valor de lealtad sino también debe de estar presente la sinceridad, el respeto, la honradez, el amor, entre otros valores.


lunes, 5 de octubre de 2015

Valores "La honestidad"

¿Qué es la Honestidad?

Es aquella cualidad humana por la que la persona se determina a elegir actuar siempre con base en la verdad y en la auténtica justicia (dando a cada quien lo que le corresponde, incluida ella misma).

Ser honesto es ser real, acorde con la evidencia que presenta el mundo y sus diversos fenómenos y elementos; es ser genuino, auténtico, objetivo. La honestidad expresa respeto por uno mismo y por los demás, que, como nosotros, "son como son" y no existe razón alguna para esconderlo. Esta actitud siembra confianza en uno mismo y en aquellos quienes están en contacto con la persona honesta.


La honestidad no consiste sólo en franqueza (capacidad de decir la verdad) sino en asumir que la verdad es sólo una y que no depende de personas o consensos sino de lo que el mundo real nos presenta como innegable e imprescindible de reconocer.

Hay que tomar la honestidad en serio, estar conscientes de cómo nos afecta cualquier falta de honestidad por pequeña que sea Hay que reconocer que es una condición fundamental para las relaciones humanas, para la amistad y la auténtica vida comunitaria. 


Ser deshonesto es ser falso, injusto, impostado, ficticio. 
La deshonestidad no respeta a la persona en sí misma y busca la sombra, el encubrimiento: es una disposición a vivir en la oscuridad. La honestidad, en cambio, tiñe la vida de confianza, sinceridad y apertura, y expresa la disposición de vivir a la luz, la luz de la verdad.